*La falta de precaución de los elementos policiales provocó un aparatoso accidente que derivó en una pérdida humana; ya hay una investigación en la Fiscalía Anticorrupción por los hechos
Naye Vélez
La falta de medidas de seguridad y negligencia por parte de elementos de la policía municipal de Tlaxco, derivó en un fatal accidente en el que perdió la vida una persona el pasado 12 de marzo, en la carretera Tlaxco-Apan, cerca de la localidad de San Antonio Huexotitla.
Los hechos ocurrieron cuando el comisario Wilebaldo Bautista Castillo y el conductor policía acreditable, Esteban Domínguez Farfán de la policía de Tlaxco, detuvieron su patrulla para presuntamente inspeccionar una camioneta pickup negra, cuyos ocupantes recogían chatarra en el tramo carretero. Sin embargo, en un acto de negligencia y falta de precaución, los oficiales no activaron sus torretas, ni colocaron señalizaciones de abanderamiento, lo que dejó a la escena sin las alertas visuales necesarias para advertir a otros conductores.
Al intentar asegurar la carga de la camioneta y trasladar la chatarra fuera de la carretera sin ninguna medida de precaución, un vehículo, identificado como un Jetta A4 gris, modelo 2007, con placas de Hidalgo, se aproximó a alta velocidad, colisionando primero con la patrulla y luego con la camioneta pickup, causando daños menores y lesionando a una mujer que fue encontrada cerca, proyectada por el impacto, sangrando de la nariz y boca.
Ante el hecho, uno de los oficiales solicitó asistencia médica a través del servicio de emergencias 911. A las 00:30 horas, llegó al lugar una ambulancia de Protección Civil de Tlaxco, que valoró a la mujer, identificada como América N., de 32 años, quien lamentablemente fue declarada sin signos vitales por los servicios de emergencia.
Al saberse responsables del trágico incidente, los elementos policiacos procedieron a detener al conductor del Jetta, llevándoselo en la misma patrulla involucrada en el accidente, sin embargo, este individuo nunca fue presentado ante las autoridades correspondientes, configurando una desaparición forzada a manos de quienes debían asegurar su presentación a la justicia.
El incidente pone en tela de juicio las prácticas y protocolos de seguridad de la policía local, quienes debido a su irresponsabilidad y actuar negligente, provocaron la pérdida de una vida humana, además de los señalamientos en contra del comandante Wilebaldo Bautista, y los oficiales Esteban Domínguez Farfán y Alejandro Reyes Flores, alias “El Bombero”, por la desaparición y manipulación de pruebas del accidente para evadir su responsabilidad.
Derivado del mal protocolo de actuación de las autoridades municipales de Tlaxco, la Fiscalía Anticorrupción ya realiza una investigación para fincar responsabilidades en contra de los elementos policiacos del municipio.