*Trasciende la lista oficial de candidatos a diputados locales por el principio de mayoría relativa, en la que figuran “estampitas repetidas” de la actual Legislatura
Naye Vélez
La dirigencia estatal del partido Morena decidió apostar por la reelección de varios diputados locales, pese a la ausencia de resultados tangibles en su labor legislativa.
Esto quedó confirmado con la filtración de la lista oficial de candidatos a diputados locales por el principio de mayoría relativa, que fue publicada el día de hoy, 25 de marzo y en la que resaltan los nombres de varios legisladores con licencia.
Entre los candidatos seleccionados para competir en los próximos comicios destacan Ever Alejandro Campech Avelar, Jaciel González Herrera, Lorena Ruiz García, Vicente Morales Pérez, Maribel León Cruz, Miguel Ángel Caballero Yonca, Bladimir Zainos Flores y Brenda Cecilia Villantes Rodríguez, todos en búsqueda de un nuevo periodo en sus cargos.
Esta lista se complementa con exfuncionarios como Madaí Pérez Carrillo, Emilio de la Peña Aponte y Ana Bertha Mastranzo Corona, quienes aspiran a representar a los distritos de Tlaxcala, Zacatelco y San Pablo del Monte, respectivamente. A pesar de las promesas de una selección basada en la competitividad, Morena ha optado por figuras ya conocidas, algunas de las cuales cargan con una percepción negativa por parte de la ciudadanía.
Un caso particularmente polémico es el de Emilio de la Peña Aponte, cuyo padre, Rafael de la Peña Bernal, ocupa el cargo de secretario de impulso agropecuario.
El “Junior” de la Peña se vio envuelto en acusaciones de desvío de recursos en septiembre de 2023, cuando un exfuncionario de la Secretaría de Medio Ambiente de Tlaxcala presentó una denuncia ante la Fiscalía General de la República y el Instituto Nacional Electoral en la que evidenciaba que los fondos de la Procuraduría de Protección al Ambiente del Estado de Tlaxcala habrían sido utilizados para favorecer su campaña hacia el Congreso Local.
La decisión de Morena de recurrir a “los mismos de siempre” sugiere una posible priorización de intereses internos y la imposición de perfiles, bajo un proceso poco transparente, que podría generar inconformidades de parte de otros perfiles y posibles rupturas al interior de la fuerza política.