_*Habitantes apuestan al desarrollo social, gracias a los programas del Sedif_
Don Cirilo Sosa Guarneros nació, creció y echó raíces en la comunidad de Zumpango del municipio de Atlangatepec y su amor a esta tierra le llevaron a considerar la mejora de las condiciones sociales, económicas y de salud de otras 18 familias de su comunidad.
Por ello, en 2023 se integraron al Programa de Salud y Bienestar Comunitario que impulsa el Sistema Estatal para el Desarrollo Integral de la Familia (Sedif) que dirige la presidenta honorífica, Mariana Espinosa de los Monteros Cuéllar.
Recuerda que estaban muy animados, porque en un inicio no podían creer que serían partícipes del programa, recibieron un módulo para vivero, herramienta, capacitación y los brotes de hortalizas y plantas medicinales: “Entre las plantas que recibimos hay lechuga, cebolla, fresa, brócoli, coliflor, así como manzanilla, pericón, ruda y estafiate”.
Con el ingreso al programa, reconoce que han dado un paso decisivo para lograr el bienestar colectivo con la participación y confianza entre los integrantes del grupo, y los resultados los están viendo por primera vez, debido a que en lo que va de enero ya han cosechado algunos productos con lo que no los tienen que comprar en el tianguis, ahora que todo está tan caro.
“Además, cumplimos con el propósito de mejorar nuestra salud, pues los productos son 100 por ciento orgánicos. Nosotros los sembramos, los fertilizamos con composta que también nos ayuda a mejorar las condiciones del suelo, al elevar la calidad de los nutrientes en nuestros productos, y también los regamos con un contenedor de agua que nos obsequiaron”.
Explica que los 19 integrantes del grupo se suman al trabajo y tres de ellos son madres solteras: Cristina Jiménez Barrera, Carla Guevara Guarneros y Mercedes Palacios Farfán, quien es dueña del terreno donde se instaló el vivero.
“Ellas trabajan igual que nosotros en el vivero y son las más agradecidas por el proyecto, ya que con las cosechas ellas pueden alimentar a sus hijos”.
Cirilo Sosa está consciente de que su comunidad es considerada por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) y por el Consejo Nacional de Población (Conapo) como una localidad de alto y muy alto rezago social por ambas instituciones, pero esta condición los impulsa a trabajar de sol a sol en sus campos y de manera coordinada en el vivero.
“Este proyecto representa para nosotros una excelente oportunidad de satisfacer necesidades básicas de la vida cotidiana, innovar nuestras economías regionales, fortalecer el tejido social y la correcta gestión de los recursos para no comprometer el bienestar de las generaciones futuras”.
Sin temor a equivocar el rumbo del proyecto, asegura que al dar buenos resultados el grupo pronto podría tener otro vivero, pues recientemente tuvieron la visita de la presidenta del Sedif, quien felicitó a los integrantes y reconoció el buen resultado y las cosechas que generan.
“Vino, nos tomó de sorpresa. No la esperábamos y para nosotros fue algo sumamente importante, no imaginábamos que alguien como ella llegara hasta este lugar, sin embargo, lo hizo y esa visita para nosotros fue increíble. Le compartimos que en el vivero trabajamos muchas horas y que hoy, después de un año, vemos los resultados de la iniciativa del DIF estatal en coordinación con el Sistema Municipal DIF, que encabeza Deysi Yazmín Llamas Jiménez”.
Los 19 integrantes de este grupo que involucra a sus familias saben que con este apoyo escribirán una nueva historia para ellos y sus familias, pues el Sedif transformó sus vidas, este es solo el primer paso para lograr la calidad de vida que esperan para las futuras generaciones de Zumpango.