René ARELLANO
El policía con identidad priista pero con intereses morenistas, Francisco Javier Carreto Gámez, ha dejado mucho que desear como Director de Seguridad Ciudadana y Movilidad del Municipio de Tlaxcala, pues desde que fue nombrado en este cargo, el robo de vehículos, autopartes y asaltos a transeúntes ha sido el pan de cada día.
Tal es el caso del 18 al 22 de octubre donde el servicio de emergencias 911 reportó solo en la capital el robo de al menos 10 vehículos que se encontraban estacionados en diferentes partes del municipio, hechos de los que solo los guardianes del orden se encargaron de recabar información y retirarse del lugar.
De igual forma, el asalto a transeúntes ha ido incrementando, ya que es bien sabido que, sobre el Gasoducto, Rivereña del Zahuapan y Loma Xicohténcatl son constantes los reportes de este tipo de sucesos violentos.
A pesar de que, a Francisco Javier Carreto, se le vea en las mesas de seguridad que encabeza el Gobierno del Estado, no ha podido hacer, ni aprender nada para combatir la inseguridad que ya se está apoderando de la capital del estado.
Además, con el fin de que los medios de comunicación no se enteren de los hechos delictivos que se registran en la capital, Carreto Gámez, ha girado instrucciones a sus oficiales de ocultar cierta información que ponga en riesgo su empleo.
Tal fue en el caso del secuestro exprés y robo de vehículo que sufrió un hombre sobre el anillo periférico a la altura de la comunidad de Acuitlapilco, mismo que fue interceptado por dos vehículos tipo Jetta y una camioneta Pick Up, de donde descendieron varios sujetos con armas cortas y largas el pasado 21 de octubre.
De igual forma del asalto con violencia que sufrieron varios usuarios de una unidad de transporte público de la ruta San Gabriel Cuauhtla-Volcanes, los cuales fueron despojados de sus pertenencias por sujetos armados.
De estos dos hechos delictivos este medio de comunicación trató de obtener información oficial, sin embargo, nadie de la Policía Municipal quiso brindar datos, pues según hay instrucciones precisas de no dar pormenores de lo que sucede en la demarcación en cuestión de seguridad.
Se espera que muy pronto Carreto Gámez entienda que no es lo mismo andar todo el día en la camioneta de Servicio Técnico de la Policía Municipal, lugar que desempeñó durante los cuatro años ocho meses en la administración de Anabell Ávalos Zempoalteca, que llevar las riendas de la corporación de seguridad municipal más importante que es la de la capital.