Vanesa ROMERO
La aprehensión del alcalde de Zacatelco, Hildeberto Pérez Álvarez, dañó al grupo de petistas del sur del estado, que ya se sentían en el poder e intocables, sobre todo de aquellos que buscan una nueva posición en las próximas elecciones, como el presidente municipal con licencia de Papalotla, Juan Octavio Rojas Cruz.
Y es que la detención inédita en la vida política del alcalde en funciones, exhibió malas prácticas en los grupos políticos del PT instalados en el sur del estado, lo que evidenció que no solo no han sabido gobernar, sino que han malversado recursos públicos, entre otras irregularidades.
La detención del alcalde apodado “El Cachorro” pegó a la intención de su hijo de sucederlo en el cargo, como si de una herencia se tratara, pero también al grupo político que habían conformado en la zona precisamente con miras a la elección del 2 de junio.
Situación similar se prevé en Papalotla, donde otro petista en el poder municipal, como Juan Octavio Rojas Cruz, ahora busca la diputación local, evidenciando que su interés no es el bienestar social, sino el personal.