*Sergio González tapizó con su propaganda postes de luz, mientras Ana Lilia Rivera y José Antonio Álvarez Lima de Morena utilizan mamparas que obstruyen la visibilidad de una vía de tránsito
Naye Vélez
La y los candidatos al Senado de la República por los partidos de Morena y el Verde Ecologista de México, aprovechan mañosamente los vacíos existentes dentro del Código Electoral Local para colocar propaganda en lugares prohibidos.
En el caso de Sergio González Hernández, candidato del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), se observó la colocación de pegatinas en postes de luz, ubicados en el boulevard Ocotlán – Santa Ana, enfrente de la Facultad de Ciencias de la Educación de la UATX.
Por otra parte, la candidata y candidato de Morena al Senado, Ana Lilia Rivera y José Antonio Álvarez Lima, utilizan una de las vías de comunicación más transitadas de la capital para colocar su propaganda frente a los automovilistas que circulan por el entronque Santa Ana – Ocotlán, o bien, dejando sus lonas y mamparas descansando sobre la señaletica y árboles de la zona.
La colocación de propaganda política y electoral, así como la pinta de bardas y el uso de equipos de sonido en la vía pública para hacer campaña, están contemplados en la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales (LGIPE) como parte la publicidad que es permitida y tiene que ser reportada ante el Instituto Nacional Electoral (INE) y los organismos electorales locales.
Sin embargo, la ley prohíbe que ésta se coloque en algunos lugares, como árboles, puentes, azoteas, cables de luz, postes de alumbrado público o en sitios que impidan la visibilidad de una vialidad o de las señales de tránsito.
En el caso del ecologista, Sergio González, la colocación de pegantes con materiales de dudosa procedencia en mobiliario público y postes de alumbrado, trasgrede la citada ley, que en su artículo 209 dice “Los partidos, coaliciones y candidatos deberán utilizar en su propaganda impresa y demás elementos promocionales materiales que no dañen el medio ambiente, preferentemente reciclables y de fácil degradación natural. Sólo podrá usarse material plástico reciclable en la propaganda electoral impresa”.
Para el caso de los morenistas, la estrategia que utilizan en cruceros y vías de comunicación es una clara violación al mismo código, que señala “No podrá colgarse en elementos del equipamiento urbano, ni obstaculizar en forma alguna la visibilidad de los señalamientos que permiten a las personas transitar y orientarse dentro de los centros de población”.
Para estos efectos, la LGIPE contempla sanciones tanto para candidatos como para partidos políticos que incurran en infracciones por propaganda.
Por ello, quienes incurran en estas faltas, podrían ser acreedores a una amonestación pública, multas, interrupción de la distribución y difusión de su propaganda o hasta la suspensión o cancelación del registro, en los términos previstos por la ley.