*Inició el cuarto trimestre de atención del servicio de equinoterapia y cerrará el año con 120 pacientes de las UBR
Dorado, Igor y Flash son los nombres de los caballos coterapeutas que ayudan a mejorar la calidad de vida de niñas y niños con discapacidad que son beneficiarios del servicio de equinoterapia del Sistema Estatal para el Desarrollo Integral de la Familia (Sedif).
El Sedif inició con el cuarto trimestre de atención con equinoterapia, en el que participarán pacientes de las Unidades Básicas de Rehabilitación (UBR) de los municipios de Chiautempan, Ixtacuixtla, Tenancingo, Terrenate, Tetla, Tlaxcala, Xaloztoc, Yauhquemehcan, Panotla, Contla, Nanacamilpa y la estatal de Tepetomatitlán.
En el evento, la directora general del Sistema Estatal DIF, Flor López Hinojosa destacó que los equinos están bien cuidados y cuentan con certificación para brindar la atención a la población infantil con algún tipo de discapacidad como un complemento terapéutico para reforzar los beneficios de la rehabilitación.
También, con la representación de la presidenta honorífica del Sedif, Mariana Espinosa de los Monteros Cuéllar, agradeció el trabajo en equipo entre los Sistemas Municipales DIF, las UBR estatales y municipales, y el Sistema Estatal DIF en beneficio de nuestras niñas y niños con discapacidad para que puedan mejorar su calidad de vida.
Y es que mencionó que está comprobado que el empleo de caballos en las rehabilitaciones refuerza las terapias para mejorar los padecimientos físicos de las personas con alguna discapacidad, el movimiento tridimensional del paso del caballo estimula el sistema nervioso, también ayuda su temperatura corporal, transmitiendo un estado de relajación muscular.
El Sedif, a través del departamento de Atención a Personas con Discapacidad, atenderá en este cuarto trimestre del año a 30 niñas y niños con discapacidad, pacientes de las UBR estatales y municipales, y plantea cerrar el año 2023 con un total de 120 pacientes atendidos de manera gratuita.
A través de este programa se atiende a niñas y niños desde los seis meses de edad a 10 años, que presentan trastornos neurológicos y ortopédicos que afecten el aparato locomotor leve o moderado, trastorno de espectro autista, parálisis cerebral infantil, trastorno en el desarrollo psicomotor, síndrome de Down, discapacidad visual y auditiva, retraso en el lenguaje, hiperactividad, problemas conductuales leves y trastorno de déficit de atención.