- El menor era objeto de agresiones verbales y físicas por el padrastro al no ser su hijo biológico.
René ARELLANO/ Arturo MARTÍNEZ
Oficiales de la Unidad de Investigación de Delitos de Alto Impacto (UIDAI) de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) aplican diversas indagatorias con el fin de esclarecer la muerte de un bebé de apenas dos años de edad, la cual se registró durante la tarde del pasado sábado 8 de octubre, en el Hospital Comunitario de El Carmen Tequexquitla.
Gracias a la primera información recabada por el Grupo Multidisciplinario de Homicidios Dolosos, se sabe que el padrastro del menor de edad ya fue detenido, pues trascendió sería el presunto autor material de la muerte violenta de la que fue objeto el pequeño.
Las primeras versiones señalaron que, el bebé, identificado como T.E.H. fue llevado al nosocomio por familiares después de no reaccionar a diversos llamados tras sufrir supuestamente un berrinche, y que, al ser revisando se confirmó la ausencia de signos vitales.
Lo que llamó la atención de los doctores de guardia es que el menor de edad presentaba varios golpes en diferentes partes de su cuerpo, por lo cual, de inmediato dieron parte a la representación social.
El cuerpo sin vida de T.E.H. fue trasladado al anfiteatro de la ciudad de Apizaco donde, después de varias horas su necropsia arrojó que el menor de había fallecido a consecuencia de un traumatismo craneoencefálico severo, además, de que presentaba diversas fracturas y al menos 4 costillas rotas.
Por ello, Salomé E., de 20 años madre del menor de edad y el padrastro, de nombre René Christian N., rindieron su declaración ante las autoridades investigadoras, sin embargo ambas presentaron inconsistencias.
En una breve relatoria de los hechos, la mamá del pequeño T.E.H. aseguró que su pareja sentimental comúnmente golpeaba al bebé, pues éste tenía cierto odio y rencor al saber quien era su padre biológico.
Por este infanticidio se abrió una Carpeta de Investigación con el número C.I. AIHUAM-2/1167/2022.