Demian MÁRQUEZ
Este jueves, la LXV Legislatura del Congreso de Tlaxcala determinó no convocar a los secretarios del gabinete estatal a comparecer tras la glosa del informe de la gobernadora Lorena Cuéllar Cisneros.
Con 19 votos a favor, la mayoría morenista optó por cerrar la puerta al escrutinio público, ignorando las exigencias de transparencia y rendición de cuentas que la ciudadanía demanda.
Diputadas como Blanca Águila Lima y Laura Flores expresaron su rechazo, calificando la decisión como un retroceso en el deber del Congreso de fiscalizar y garantizar resultados para la población.
Águila Lima señaló que el Congreso está renunciando a su responsabilidad de supervisar a las autoridades, por su parte, Flores Lozano lamentó que los diputados oficialistas prioricen proteger al gobierno en lugar de exigir respuestas ante temas críticos como la creciente inseguridad.
Recalcaron que esta negativa no solo representa un golpe a la rendición de cuentas, sino que también envía un mensaje de falta de interés en defender los intereses de la ciudadanía.